
La Policía Local de Elda ha impuesto 16 sanciones en el marco de una campaña de sensibilización contra la contaminación acústica provocada por ciclomotores y motocicletas. Durante la semana pasada, se realizaron controles aleatorios en distintos puntos del municipio, inspeccionando un total de 45 vehículos.
Los agentes comprobaron que los tubos de escape fuesen los originales o, en su defecto, que estuvieran homologados y con la ITV en regla. De las 16 sanciones impuestas, nueve fueron por no haber pasado la ITV, seis por utilizar un tubo de escape no homologado y una por carecer del permiso de conducción.
La concejala de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Transporte, Silvia Ibáñez, ha señalado que “el ruido producido por los vehículos a motor y especialmente por los ciclomotores es un motivo de queja por parte de los vecinos y vecinas, especialmente por la noche”. En este sentido, ha insistido en que la vigilancia se ha intensificado y ha hecho un llamamiento a la conciencia y prudencia de los conductores.

Ibáñez ha recalcado que esta campaña tiene carácter disuasorio y pedagógico, y no persigue fines recaudatorios: “El ruido es un problema grave y molesto para el resto de ciudadanos y por ese motivo hemos puesto en marcha esta campaña conjunta con la Concejalía de Medio Ambiente”.
Por su parte, la concejala de Medio Ambiente, Cristina Rodríguez, ha destacado la vertiente educativa de la iniciativa, con 20 horas de formación ambiental en centros escolares de Elda. “A través de talleres dinámicos hemos enseñado a los estudiantes los efectos del ruido excesivo y cómo pueden contribuir a reducirlo en su entorno”, ha indicado. Además, ha subrayado la importancia de implicar a las nuevas generaciones: “El respeto por el medio ambiente empieza por pequeños gestos”.
La campaña forma parte de las acciones del Ayuntamiento de Elda para mejorar la calidad de vida urbana y concienciar sobre el impacto del ruido en el bienestar ciudadano.